¿Que és un Profesional independiente?
Un profesional independiente es la persona que trabaja por cuenta propia y presta sus servicios y/o vende sus productos a otros de forma autónoma. A día de hoy, el número de profesionales independientes está creciendo de forma exponencial como fórmula perfecta para sacar adelante proyectos y negocios propios. El profesional independiente no tiene una relación profesional con otra empresa, ni está contratado ni trabaja para terceros. Se le contrata por obra y servicio y cobrará sus servicios a través de facturas. ¿Qué implica en detalle ser un profesional independiente? ¿Es lo mismo ser profesional independiente que profesional autónomo?
Características de un profesional independiente
Un profesional independiente tiene unas características muy particulares y que lo hacen claramente identificable. Si algo le marca y reseña es sin duda, que no suele (a no ser que ya lleve años y haya superado esta barrera) horario. Suele trabajar muchísimas horas para sacar su proyecto adelante y casi siempre, está disponible cuando se le necesita. Eso sí, hay que aprender también desde el otro lado (los contratantes) que un profesional independiente y/o freelance, no es un 24/7. Tiene vida y nos está ofreciendo un servicio. Además, como freelance que es, no está siempre para y por nuestro pedido – proyecto. Pero esto, es otro cantar y seguro que daría para mucho contenido.
A efectos legales y prácticos, un profesional independiente también se caracteriza por su condición de autónomo (dado de alta como tal). Enumeremos mejor una a una estas características para poder asentar las bases.
- Autónomo: un trabajador independiente deberá estar dado de alta en el Régimen General Especial de trabajadores Autónomos para poder facturar. Es decir, un trabajador independiente es un autónomo como todos conocemos.
- Cotización IRPF: al estar dado de alta como autónomo, un profesional independiente estará obligado a cotizar a la Seguridad Social con el IRPF correspondiente que incluirá en las facturas emitidas.
Relacionado: Tramos de IRPF 2021
- Empleados: Un trabajador independiente puede o no tener empleados a su cargo. Esto dependerá de la estructura de su negocio, de sus necesidades y de lo que estipule para su actividad. Lo importante es que ser trabajador independiente no excluye de poder tener contratados a otras personas o colaborar con otros profesionales independientes.
- No contrato: un profesional independiente no regirá su relación profesional con una empresa por un contrato de trabajo sino que estipularán una colaboración por un servicio prestado a cambio de un pago mediante factura que equivale a la valoración de esa tarea.
- Finiquitos y preavisos: cuando una colaboración entre un profesional independiente y una empresa finaliza (bien porque se haya terminado el proyecto o porque se decida no continuar con la relación profesional), no existe ningún tipo de contraprestación como finiquito o indemnización. La relación se dará por extinguida abonando la empresa contratante la factura correspondiente y nada más. Tampoco habrá obligación (a no ser que en el contrato de obra y servicio así se estipule) de realizar pre-aviso para la finalización de la colaboración (lo lógico cuando son relaciones de confianza y de medio – largo tiempo es estipular un pre-aviso en el contrato para que ambas partes puedan trabajar cómodas y confortables).
- Vacaciones: cómo no es una relación laboral al uso (en el que se esté contratado), el trabajador independiente no tiene derecho a vacaciones retribuidas por parte de la empresa que le encarga el trabajo. Las vacaciones que el profesional independiente se quiera coger o de las que se quiera beneficiar irán de su cuenta y riesgo ya que es su propio jefe y se responsabiliza de sus horarios y días de trabajo – no trabajo.
Trabajador por cuenta ajena ¿qué es?
Antes de continuar con el amplio espectro de las características, obligaciones y particularidades de un profesional independiente es importante valorar y detallar lo que implica el contrapunto – lo opuesto. El trabajador independiente (que no está ligado de forma contractual a ninguna empresa y lidera su propio proyecto – empresa) tiene su opuesto en el profesional o trabajador por cuenta ajena. ¿Qué es exactamente?
Un profesional por cuenta ajena es aquel que se caracteriza por tener un contrato de trabajo con una empresa. Tiene una relación estable y comprometida con una compañía para la que presta sus servicios bajo un horario, en un lugar determinado, con unas condiciones particulares y por el que recibe un salario en formato de nómina.
Para que un trabajador por cuenta ajena lo sea, este debe prestar sus servicios a la empresa que en su defecto, le realizará un contrato de trabajo. En él se incluirán los pormenores de su relación contractual y lo que aporta cada parte: el horario, el lugar de trabajo, el rol profesional y el salario a percibir. Un contrato que la empresa, una vez firmado, remitirá a la Seguridad Social para darlo de alta (imprescindible y obligatorio). A partir de este momento el trabajador formará parte del equipo de la empresa y esta, se hará cargo de las responsabilidades fiscales del mismo.
Igualmente, el trabajador por cuenta ajena tiene beneficios adquiridos tales como vacaciones (según convenio) y retribución en caso de baja laboral y/o suspensión del contrato (despido).
Diferencias entre profesional independiente y trabajador por cuenta ajena
Ahora que conocemos las dos figuras, trabajador independiente y trabajador por cuenta ajena, es bastante evidente que entre ambos existen importantes diferencias. La principal, es la vinculación para con quien se prestan los servicios.
Relación contractual
En el caso del profesional independiente este contrato no existe como tal sino que es un contrato de obra y servicio. El profesional por cuenta ajena sí está sujeto a un contrato laboral que ambas partes deben cumplir.
Pago por servicio vs. Sueldo:
El profesional por cuenta ajena no cobra un sueldo fijo ni variable pero determinado y con asiduidad sino que recibirá lo acordado en presupuesto previo en base a sus tareas realizadas. El profesional por cuenta ajena tendrá a final de cada mes el ingreso de su sueldo pactado en condición de nómina.
Riesgo asumido
Dicen que un trabajador por cuenta ajena goza de mayor seguridad ya que siempre deberá percibir su salario a pesar de los altibajos que pueda sufrir la empresa contratante. El trabajador por cuenta propia también debe cobrar su factura a pesar de todo ya que es un trabajo pactado y acordado previamente y que cuando se emite la factura ya estará realizado.
También el riesgo se considera mayor en el caso del trabajador por cuenta propia ya que este no tiene una relación de contrato laboral y es más fácil prescindir de sus servicios en caso de que la empresa así lo considere y quiera: no habrá despido, finiquito, preaviso (si no se pacta) ni indemnización.
Material de trabajo
Para los trabajadores por cuenta ajena el material necesario para realizar su trabajo deberá ser proporcionado por la empresa contratante mientras que para un trabajador por cuenta propia deberá hacerse con todo lo que considere que necesitará para el desarrollo de su actividad profesional.
Libertad horaria
Este es sin duda el mayor de los beneficios de los que goza un trabajador por cuenta propia y es que no está sujeto a horarios ni obligaciones más allá de la entrega del trabajo acordado. No tiene horario de trabajo ni días que cumplir sino trabajo que entregar. No tendrá que dar obligaciones de cuándo o cómo trabaja algo que por el contrario un trabajador por cuenta ajena no goza. Este último tiene un horario de trabajo que cumplir y unas jornadas que realizar.
Vacaciones
En la línea del punto anterior, un trabajador independiente tiene las vacaciones que él/ella considere y quiera cogerse. Eso sí, estas vacaciones no son retribuidas como en el caso del trabajador por cuenta ajena que aunque tenga que pactarlas con la empresa (en días y fechas) sí estará cobrando esos días que no trabaja.
Lugar de trabajo
El trabajador por cuenta propia podrá trabajar allí donde quiera y/o pueda según su actividad profesional. Puede ser que sea desde su casa, desde una oficina compartida, desde un lugar remoto… Todo vale porque lo único que tiene que cumplir es la entrega del trabajo realizado.
Un trabajador por cuenta ajena tendrá que desarrollar su trabajo allí donde la empresa le indique y estipule: oficina u otros.
Beneficios y desventajas de ser profesional independiente
Este es uno de los puntos “más relativos” y que también más controversia levanta en cuanto a los profesionales independientes versus profesionales por cuenta ajena. Y es que en ambas posiciones se viven ventajas pero también inconvenientes. Por supuesto, ser profesional independiente no iba a ser menos.
Beneficios:
Seguro que todas las estadísticas y estudios realizados concluyen de la misma manera: la libertad es el mayor beneficio de un profesional independiente. No tener que responder a horarios establecidos y encorsetados es lo que más valoran los freelances y autónomos. Es la libertad lo que más les motiva a seguir con sus proyectos aunque a veces, el resto de características se tornen duras y complicadas.
El freelance o profesional independiente ELIGE y esto, uno por cuenta ajena no puede hacerlo. El poder de elección es altamente valorado y de ahí que se erija como uno de los principales beneficios para ser y mantenerse como profesional independiente.
Otro de los beneficios derivados de este poder de elección es que también se puede decidir sobre los proyectos a ejecutar. Dependiendo de la situación de cada profesional, este podrá tener un marco más o menos amplio para elegir con qué tipo de cliente quiere trabajar así como proyectos. Incluso, en determinados momentos y por diferentes circunstancias, elegir no hacer alguna tarea o proyecto.
Desventajas:
Por supuesto, por muy bonito que parezca algo, en pocas ocasiones está libre de tener alguna que otra desventaja. Ser trabajador por cuenta propia o independiente no iba a ser menos. Es paradójico porque lo mismo que catalogamos como beneficios (la libertad) para algunos, se convierte en la mayor desventaja y es que esa libertad, se traduce en inseguridad.
Un profesional independiente suele tener más inestabilidad e inseguridad que uno que es por cuenta ajena. Carece de un contrato, de una vinculación estable y en caso de disolución de la colaboración, no hay paro y/o indemnización.
Llegados a este punto cada uno tiene que valorar qué le interesa más y hacia qué lado se inclina la balanza. Es algo sumamente personal que dependerá de los objetivos y sueños de cada uno. No hay ni existe una respuesta acertada ni que sirva para todos.
Ser profesional independiente y trabajador por cuenta ajena a la vez
Una de las grandes dudas que nos surgen a todos cuando tenemos en mente un proyecto personal y queremos lanzarnos al mundo del autónomo es si podemos hacerlo mientras estamos trabajando para otra empresa. Es decir: ¿podemos ser profesional independiente y trabajador por cuenta ajena a la vez? ¿Puedo tener nómina en una empresa y ser autónomo simultáneamente?
La respuesta es sí. Es posible y de hecho muchas personas están en esta situación o bien porque están por ejemplo a media jornada con una empresa y después desarrollan su proyecto o porque cuando se lanzan a ser autónomos al principio simultanean ambas actividades para tener una cierta seguridad.
Lo único que tendrás que hacer es como siempre, informar a Hacienda de tu situación y cumplir con las obligaciones fiscales de ambos regímenes. En tu nomina se descontará el IRPF que se deba (se encarga la empresa contratante) y luego en tus facturas como autónomos tendrás que incluir el IVA y el IRPF correspondiente como tal.
Si eres trabajador por cuenta propia lo mejor es siempre tener organizadas todas tus finanzas y negocio al completo. Vas a tener muchas situaciones diarias que te robarán tiempo y energía así que la gestión de facturación, la de proyectos y tener bien organizados tus clientes tiene que ser algo fácil. Con billage tendrás todo en un único lugar y siempre, disponible en cualquier dispositivo. Pruébalo ahora gratis.
This post is also available in: Spanish